A mí toda la vida me ha gustado hacer planes, tener control y planificar, aunque quizás no de la manera mas saludable. La forma adecuada es Planificar Sin Expectativas rígidas que te puedan generar frustración.
Enfocarte en el presente y hacer lo que sientes, tener un camino, pero no estar tanto en el resultado que se te pase disfrutar del propio camino.
Hace tres años empecé a ver que detrás de todos estos planes y planificaciones podía haber un deseo de controlarlo todo, posiblemente en base a inseguridades y miedos.
Yo quería saber el domingo qué es lo que iba a pasar en mi vida, en todos los sentidos, el lunes, el martes, el miércoles, la semana siguiente, el mes siguiente.
Como soy economista, estoy acostumbrado a hacer balances y al control de ingresos y gastos. En alguna ocasión, hace mucho tiempo, elaboré los presupuestos del año siguiente de mi economía particular, en base a los ingresos y gastos de años anteriores.
Nada de esto es intrínsecamente malo o perjudicial en principio.
Pero hay una forma de saber si es una costumbre sana, sencilla y abierta o si no lo es.
Por ejemplo si no se cumple uno de los planes que tenías previsto y esto te genera frustración, esto quiere decir que no estás enfocando adecuadamente, todas estas planificaciones te han limitado.
En algún caso, si yo había planificado con mi pareja una cena romántica el sábado, en la que yo había puesto expectativas de todo tipo, mi vida se complicaba mucho si el viernes cambiábamos de planes, lo aceptaba a regañadientes y en algunos casos me generaba rabia, frustración e incluso buscaba culpables internamente.
Por ejemplo si haces el ejercicio mental de no programar nada para la semana, a la espera de ver lo que la semana te ofrece y de repente sientes un poco de vértigo, sientes que esa sensación no te gusta, sientes que quieres saber y planificar lo que va a pasar, entonces aquí parece que algo falla.
Como a mí me pasaban estas cosas y muchas más, empecé a ver que tenía que trabajarme esto.
Empecé a mostrarme más flexible, empecé a programar menos, quizás yo no era un obsesivo del control, pero seguramente sí tenía grandes inseguridades.
Ahora estoy en otra fase que quiero compartir con todos vosotros y que considero es una lección de vida muy positiva: hacer planes sin expectativas, HACER PLANES ENTENDIENDO TODO LO QUE HAY DETRÁS.
En principio no parece ni tan fácil, ni tan coherente.
Todas las empresas generan presupuestos y planes de empresas anuales. Por supuesto que puede haber desviaciones positivas y negativas, pero suele ser necesario hacer informes para justificarlo todo.
De la misma manera, si queremos ser veterinarios o cualquier otra cosa, tenemos que hacer planes a varios años. En general, no viene bien hacer un año, primero de Arquitectura, hacer otro año, primero de Medicina y hacer otro año, primero de Derecho.
En mi vida actual, los planes se pueden cambiar en cualquier momento. No sólo no me generan frustración cuando no se cumplen, sino que además, tengo el convencimiento total de que si no se cumplen, es porque me espera algo mejor.
Ocuparse y no preocuparse.
Tomar acción para llevar la vida que deseas, en vez de reaccionar a las cosas que te pasan.
Para poder andar este camino aconsejo muy encarecidamente meditar cada día, enfocado a objetivos y alinear nuestros centros de decisión.
▲ Cristobal Amo Martin, Practitioner en PNL, Especialista en Descodificación Natural y Terapia Saama ▲ Consulta de Sanación Cuántica y Desbloqueo Emocional: https://leydeatraccionyabundancia.com/consulta-saama/
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▲ Escritor y Conferenciante en VIVIR BIEN ES FÁCIL SI SABES CÓMO.
Wikipedia:
“La frustración es una respuesta emocional común a la oposición, relacionada con la ira y la decepción, que surge de la percepción de resistencia al cumplimiento de la voluntad individual. Cuanto mayor es la obstrucción y la voluntad, mayor también será probablemente la frustración. La causa de la frustración puede ser interna o externa.
En las personas, la frustración interna puede surgir del conflicto y también puede ser una fuente interna de la frustración, cuando uno tiene objetivos contrapuestos que interfieran unos con otros, puede crear una disonancia cognitiva. Las causas externas de la frustración implican condiciones fuera de un individuo, como un camino bloqueado o una tarea difícil. Mientras que hacer frente a la frustración, algunas personas pueden participar en el comportamiento pasivo-agresivo, lo que hace difícil identificar las causas originales de su frustración, ya que las respuestas son indirectas. Una respuesta más directa, y común, es una propensión a la agresión.”
“Una expectativa es lo que se considera lo más probable que suceda. Una expectativa, que es una suposición centrada en el futuro, puede o no ser realista. Un resultado menos ventajoso ocasiona una decepción, al menos generalmente. Si algo que pasa es completamente inesperado suele ser una sorpresa. Una expectativa sobre la conducta o desempeño de otra persona, expresada a esa persona, puede tener la naturaleza de una fuerte petición, o una orden, y no solo una sugerencia.”
“La decepción es un sentimiento de insatisfacción que surge cuando no se cumplen las expectativas sobre un deseo o una persona. Se forma en unir dos emociones primarias, la sorpresa y la pena. La decepción, si perdura, es un desencadenante para la frustración y más adelante, la depresión. Similar al arrepentimiento, se diferencia en que el sentimiento de arrepentimiento se enfoca básicamente en fallas en elecciones personales mientras que el de decepción se enfoca más en la insatisfacción proveniente del aspecto externo. Es una fuente de estrés psicológico.”